ICTA-IPC, sign-o-the-times
Hace unas semanas se puso de manifiesto que el contexto en la cual se erige arquitectura está cambiando, pero también, que aún hay bastantes fuerzas reaccionarios por superar. Hace mas o menos un año DATAAE & Harquitectes acabaron el edificio ICTA-IPC en el campus de la UAB en Bellaterra. Es un edificio invernadero, donde se han aplicado al máximo estrategias pasivas para la climatización y donde la definición del confort de los espacios ha sido aquilatada conforme el uso y los usuarios. Es un excelente ejercicio de cómo el sentido común puede reducir el consumo de recursos (energéticos pero también de aguas) durante la vida útil del edificio, mientras que los materiales elegidos han reducidos sustancialmente la huella ecológico de la construcción.
Que pasó pues al principio de julio, cuando el jurado de los premios FAD publicó su veredicto sobra la producción arquitectónica de 2014? Pues pasó que esta magnifica obra, que refleja un camino de futuro para la arquitectura en España, no merecía ganar, según el jurado profesional. Ha sido la falta de definición estética? Los poca clase de los materiales? … no se sabe. Lo que si que se sabe que estando en el edificio, uno está estupendo y que el jurado popular si que ha querido declarar este edificio ganador del año 2015. Para mi esto pone en evidencia que algo se está progresando en nuestra sociedad, que hay una creciente conciencia de que las cosas simplemente por bonito ya no valen y que hay una belleza que radica en lo sostenible, que tiene más merito y que nos sirve más a todos.
Felicidades para DATAAE & Harquitectes!